SOY DIFERENTE...
La búsqueda de ser “diferente” se nos ha tornado en estrés y angustia. El mismo sistema alienta esta sensación. Primero consumimos, luego nos hace caer en cuenta que no somos los únicos, que muchos otros ya lo hacen y entonces tomamos distancia y recaemos en un nuevo consumo para más tarde repetir la acción…una rueda sin fin.